Season 8, episode 9
This new season of fresh stories all about personal experiences. Many of my favorite stories of my mom’s life in Indonesia are about animals. I loved seeing pictures and hearing stories of her animal encounters. Today, I am going to share these stories with you.
This story is told in the first and third person using mostly the past tense. Important vocabulary in the story includes: “lagarto” (lizard), “techo” (ceiling/roof), “cabra” (goat), “piel” (skin) and “silvestre” (wild).
Una vida con animales en Indonesia, parte 3
Cuando mi madre tenía ocho años hizo el viaje de Michigan a Sumatra, Indonesia donde mi abuelo trabajó por US Rubber en las plantaciones de caucho. Me encantaba oír los cuentos de su tiempo en Indonesia. Unas de mis historias favoritas eran las historias de animales. Hay tantos animales en Indonesia, ambos domesticados y silvestres.
Al lado de la casa de mis padres había unas cabras. A mi madre y su hermana les gustaba visitar las cabras. Les acariciaban y les daban atención. Una de las cabras solo tenía tres patas, entonces le dieron atención extra.
Uno de los amigos de mis abuelos tenía caballos que se llamaban Sandy y Santa Clause. Los caballos eran palominos muy bonitos. Mi madre y su hermana fueron a la casa de sus amigos y recibieron lecciones de montar a caballo. Su entrenador se llamaba Ponyron. Mi madre aprendió mucho. Hasta montó a caballo sin silla o riendas.
Mi madre y su hermana montaban a bicicleta con frecuencia. Una vez cuando andaban en bici, vieron un grupo de personas. Las personas estaban alrededor de un lagarto monitor que medía cinco pies (150 centímetros). El grupo estaba tratando de echar el lagarto del pueblo. El lagarto monitor en Sumatra es vegetariano, pero mi madre creía que era espantoso y tenía miedo. Mi abuelo veía los lagartos monitores en las plantaciones de árboles de caucho. Les gustaba tomar el sol. Mi abuelo no tenía miedo como mi mamá, simplemente los pasaba sin problema.
Los lagartos también a veces entraron en la casa, pero eran lagartos pequeños, o lagartijas. Esas lagartijas se llamaban «cheechucks» por el sonido que hacían. Caminaban por las paredes, los techos y el suelo. Comían los insectos. Si las agarraras por la cola, la cola se caería del cuerpo y crecerían una cola nueva. Las lagartijas eran inofensivas, pero me madre se asustaba cada vez que veía una en la casa.
Otro animal que veían cerca de la casa fue el mono, que en Indonesia es «monyet». Los monos corrían por el techo de la casa y jugaban en los árboles. Mi madre quería ver un orangután porque vivían en Indonesia. «Orang» significa hombre y «utan» significa jungla, entonces los orangutanes son los hombres de la jungla. Pero desafortunadamente, mi madre no vio un orangután en la jungla.
Un animal que veían mucho era el búfalo de agua. Los búfalos de agua trabajan en los campos de arroz. Eran animales domesticados, no eran silvestres. No había tractores entonces el búfalo de agua era el tractor. Eran buenos trabajadores porque eran fuertes y dóciles. Solo necesitaban comida y tiempo en el agua cuando hacía calor. Una vez en un evento de US Rubber mi madre y su hermana montaron a un búfalo de agua. Es una de mis fotos favoritas.
Un animal que mi madre vio que no quería ver, pero que vio en dos ocasiones, fue el pitón. El pitón es una serpiente muy grande. Una vez un pitón entro al gallinero. Mi abuelo fue con el perro Balaju para asustar al pitón. Otras personas vinieron para ayudar y el pitón salió del gallinero sin matar a todas las gallinas.
El segundo encuentro con el pitón fue muy dramático. Un pitón de diecisiete (17) pies, o cinco (5) metros comió una cabra. Pero hubo un problema, la cabra estaba atada a un árbol. Cuando el pitón comió la cabra, se quedó atado al árbol también. La policía llegó y mató al pitón. Un americano compró la serpiente y la puso en su jardín. Muchas personas fueron a ver el pitón tan grande, incluyendo mis abuelos y sus hijos. Vi la foto de mi madre y su hermana gemela al lado del pitón varias veces cuando era niña. Mi madre y su hermana son casi idénticas y la cabra es obvia en el estómago del serpiente.
El animal silvestre más peligroso de Indonesia es el tigre. La palabra tigre en Indonesia es «hari mau». Ahora el tigre de Sumatra está en peligro de la extinción, pero en el año 1960 (mil novecientos sesenta), no estaba en peligro y había muchos tigres que entraron en el pueblo.
La maestra de mi madre tenía una perra. Cuando su perra tuvo bebés, puso los bebés en su porche. En la noche, un tigre llegó a la casa y comió todos los perritos. Otro tigre saltó por la ventana de una casa. Al entrar en la casa, aterrizó en una mesa. La mesa se cayó y el tigre se asustó y se fue de la casa por la ventana. Cuando las personas que vivían en la casa llegaron para ver qué causó tanto ruido, encontraron mucho pelo de tigre.
Mi abuela quería la piel de un tigre. Como mencioné, ahora el tigre Sumatra está en peligro, pero en aquél entonces y cazar y matar los tigres fue una profesión. Hubo un cazador de tigres que se llamaba Tanangee. Tanangee era el gerente de una plantación de caucho varias millas de Kisaren, donde vivían mis abuelos. En la noche, Tanangee cazaba y mataba a tigres que causaban problemas. Mi abuelo le pagó a Tanangee por la piel del próximo tigre que mató. La compañía US Rubber también pagó a Tanangee por matar el tigre, porque atacó a un obrero y el gobierno de Sumatra también pagó a Tanangee por matar el tigre.
La piel del tigre llegó cuando mis abuelos ya estaban de vuelta en Michigan. Cuando yo era niña, la piel estaba en una caja de cedro en la sala de la casa de mis abuelos. Yo recuerdo bien ver la piel. Era muy bonita. La cabeza tenía ojos de vidrio. Los dientes eran largos y afilados. Las garras también eran grandes y afiladas. Antes de morir, mis abuelos donaron la piel a la Universidad del estado de Michigan.
Mi madre recuerda mucho de sus encuentros con animales en Indonesia. También recuerda las actitudes de otras personas con sus animales. Una mujer holandesa creía en la reencarnación. Creía que las personas buenas volvieron a la Tierra como gatos o perros. Las personas malas volvieron como serpientes o lagartijas. Trataba muy bien a sus gatos y perros porque creía que eran miembros de su familia.
Una vez, esa mujer visitó a mi abuela. Mi madre tenía un gatito que se llamaba Blacksweet, pero no era muy dulce. Cuando la mujer estaba hablando con mi abuela, el gatito decidió escalar la cortina. Mi abuela estaba furiosa. Agarró al gatito y lo echó afuera. La mujer holandesa estaba sorprendida. Dijo: «¡Ethel, ese gatito podría ser tu tía!»
Mi madre tuvo muchas experiencias únicas en Indonesia, pero las foto y las historias de los animales siempre serán mis favoritas.
El fin.
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I really enjoy creating and sharing simple, comprehensible stories in Spanish. I work hard to provide tools and supports for those who want to learn Spanish and I like to keep it ad free. Please, consider buying me a taco to support my work!
You can download a printer-friendly PDF of this story. Looking for the English translation? I have a PDF for that too! Read a paragraph in Spanish and then read the English translation to see what you understood.
Hi Camille I love Spanish and would love to speak Spanish i listen to your stories even though I do not understand I am 58 years old and hope one day I will be able to understand and speak Spanish
Thank you for your stories. My wife and I spend 2 months in Spain every year. We have lived in Poland for the last 15, coming from the Chicago area. We came to research my family history and stayed.
I have been studying Spanish for 3 years and the stories help improve my vocabulary and pronunciation. I listen to the same story for 1 week. First, I just listen to it for words I don’t know. I look them up and then listen for the second time. The third time is for pronunciation. The fourth day is for inflection. The fifth day, I speak the story along with you. The sixth and seventh day is just to get it deeper into my brain.
This is a great process! Thank you for sharing it!
Normally really enjoy your stuff but felt the parts about killing Tigers was a rare misstep.
The near extinction of these beautiful animals is a grave matter and I feel you seemed to ignore this when describing your families’ participation in their persecution
Hola Paul,
I understand your feelings. I do mention twice that the tiger is endangered as I specifically wanted to make that point and not ignore it. I am also not going to ignore what has led the tiger to extinction, which included professional tiger hunters. To clarify, my grandparents did not pay for the tiger to be killed, the US Rubber company and the Sumatran government paid a professional tiger hunter to kill a tiger that was attacking workers on the rubber plantation. My grandparents paid him for the skin. They knew that Tanangee would be killing a tiger (it was one of his professions) and asked him to send them the skin. This was not uncommon in 1960.
It is easy to judge the past with the information we have now. It is much harder to understand the past with the mindsets and situations they lived in then. I suspected this information could be controversial, but it was a big part of my grandparents’ and mother’s stories of Indonesia and seeing the tiger skin is a big memory of mine.
With respect Camilla this is not some story from the Middle Ages where we could agree that different mindsets held sway. It’s from comparatively recently when, once again with respect, it’s fair to claim they should have known better and I feel that by you including it in the story you are to a degree condoning their behaviour.
Thanks for taking the time to reply though